Panorama Político de Entre Ríos
Mentiroso, mentiroso

El doble discurso de Frigerio

Frigerio maneja un discurso para la provincia, pero envía mensajes claros a la gestión de centralista de Milei, dice "que no está de acuerdo, pero apoya de todas formas". (Dibujo: NOVA)

El gobernador, Rogelio Frigerio se mostró cauteloso y renuente a apoyar algunas de las medidas enviadas al Congreso nacional, específicamente sobre la coparticipación, sin embargo confirmó que los diputados nacionales que responden a su gestión respaldarán la sanción de la cuestionada "Ley Ómnibus" del presidente Javier Milei.

Días atrás el gobernador de la provincia de Entre Ríos cuestionó algunas de las medidas económicas de la Ley Ómnibus que el presidente Milei, envió al Congreso nacional, puntualmente hizo referencia al "Impuesto País", y las modificaciones que se presentan en el cuestionado proyecto del gobierno nacional.

Se le pide a Frigerio que defienda los intereses de la provincia, en el marco del tratamiento de la mencionada ley. Uno de los puntos sensibles en la discusión con el gobierno nacionales el "Impuesto País", vale señalar que Entre Ríos podría recibir 114.210 millones de pesos durante el 2024, monto que brindaría un alivio financiero a la provincia.

Parte del reclamo a los legisladores de Frigerio, que junto al mandatario provincial garantizaron su apoyo a la Ley Ómnibus, es que “pidan coparticipar el impuesto PAIS”. Algo que Milei utiliza como presión contra los gobernadores, de cara a la aprobación del paquete de medidas que impulsa.

La coparticipación del "tributo País" estuvo en las negociaciones, a raíz del reclamo de los gobernadores, y cuando mostraba señales de avance, el gobierno nacional congeló el debate y lo postergó, junto a las amenazas del propio presidente Milei, de dejar "fundidas" a las provincias que no apoyen su plan de gobierno.

Más de 30.000 paranaenses expresaron su repudio en las calles al brutal ajuste mileimacrista y en toda las principales ciudades de la provincia se realizaron importantes movilizaciones para manifestarse en contra de la Ley Ómnibus y el DNU con los que se intenta pasar por encima de los derechos de los trabajadores, la educación pública y la democracia. Esta situación sumada a los comunicados de senadores y diputados de la oposición entrerriana manifestándose en contra del paquete de medidas, no pasaron desapercibidos por Frigerio, quien utiliza cada espacio de comunicación en la provincia, para aclarar que no está de acuerdo con las restricciones que busca imponer Javier Milei, pero simultáneamente le garantiza el voto de los diputados que responden a su mandato, haciéndose eco de las amenazas que lanzó el presidente : "Los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos", disparó sin rodeos contra los gobernadores en modo autócrata, cabe señalar que la Libertad Avanza no tiene ningún gobernador propio, por ese motivo no recibe fuego propio.

A los agresivos mensajes emitidos por el presidente Milei y el endeudador serial de su ministro de Economía Luis Caputo, Rogelio Frigerio les contestó: "No me manejo reaccionando a presiones", y además afirmó que "el gobierno nacional no ha transferido prácticamente ningún peso", a Entre Ríos. El gobernador precisó que "tratará de amortiguar y compensar las decisiones del gobierno nacional que tienen impacto todos los días en la vida de los entrerrianos". Los argumentos del gobernador devienen en palabras casi sin sentido ni conexión con la realidad, teniendo en cuenta que si Milei recorta más aun los aportes nacionales, Frigerio no tiene forma de compensar, ni siquiera de pagar sueldos.

Dentro de este difícil marco, ¿cuál es el significado de las grandilocuentes frases de Frigerio en los medios de comunicación de la provincia, donde expresa su intención de colaborar con un Gobierno nacional que no tiene mandatarios y muy pocos diputados y senadores, confirmando y haciendo confirmar a sus legisladores nacionales, que apoyará medidas para "gestionar y generar gobernabilidad ? "Si apoyamos, es porque creemos que ese es el camino", espetó Frigerio, dejando confundidos a propios y ajenos.

Frente a las fuertes intimidaciones del gobierno nacional para con los dudosos mandatarios provinciales, lo que debería haber hecho Frigerio, si ciertamente busca mejorar la calidad de vida de los entrerrianos, es junto a los demás gobernadores, enfrentar a un Gobierno que sin apoyos externos no puede hacer casi nada por la falta de votos en el Congreso y que encima repite hasta el absurdo que "no negocia". Debería haberse opuesto sin miramientos frente al centralismo de un Milei que dinamitó la obra pública y frenó en seco las transferencias discrecionales a las provincias y que intentará profundizar ese camino porque considera que una parte importante del ajuste lo tiene que pagar, además de los trabajadores y jubilados, las provincias, sin embargo nada de esto ocurrió.

Rogelio Frigerio decidió acompañar la gestión de Milei, pero bajo condiciones nadie conoce. La intención del mandatario entrerriano de ser un aliado menor de la reacción conservadora no tiene en cuenta que, en el esquema que pretende imponer Milei, sobran las provincias, éste no las tiene en cuenta, porque no posee ni gobernadores ni intendentes. Con la mentira de "no hay plata", dispuso grandes recortes en las transferencias a las provincias para que el Gobierno nacional pueda pagar la brutal deuda con el FMI que contrajo su socio Mauricio Macri. Milei piensa pagar al FMI con el dinero que le retirará a las provincias, y en este puntual tema, el silencio de Frigerio y sus legisladores es alarmante.

Desde el Ejecutivo nacional afirman que podría haber una reunión con los mandatarios en las próximas semanas y sostienen la postura de no ceder ante la presión para coparticipar el impuesto PAIS.

La gestión de Milei condiciona la negociación del nuevo pacto fiscal con los gobernadores a la media sanción de la Ley Ómnibus. El oficialismo ya contactó a algunos mandatarios provinciales afines a la gestión y planea reorganizar las previsiones sobre las cuentas nacionales una vez que el proyecto “Bases” logre su paso al Senado.

En la Casa Rosada aseveran que el acuerdo por el capítulo fiscal se negociaría en las próximas semanas, pero que su tratado quedaría para las sesiones ordinarias.

Al margen de las versiones que circularon sobre que el encuentro por estos días, desde el oficialismo negaron esa posibilidad y reiteraron que tendría lugar solo si el proyecto se aprueba en Diputados.

“Eso no se negocia. Si no hay ley, no hay pacto fiscal. Vamos a sentarnos de nuevo a diagramarlo cuando pase el proyecto. Lo sacamos del paquete porque trababa su aprobación, ahora tendría que aprobarse sin problema”, manifestó un funcionario cercano a Milei.

Frigerio debería haber aprovechado la incertidumbre que está implantada de la escena nacional, con el gobierno de Milei, para buscar alianzas con todos los sectores productivos del interior provincial. Cabe recordar que la ventaja que Frigerio obtuvo sobre Adán Bahl en los comicios de 2023, provinieron íntegramente del interior productivo, ya que en la capital de la provincia, Paraná ganó el peronismo.

Las críticas de la Casa Gris al proyecto de país que ponen de manifiesto el DNU de Milei y el megaproyecto de ley al que cada día se le descubren implicancias más complicada -todavía no se percataron que si la Nación firma un acuerdo para la radicación de una empresa extranjera, provincia y municipios estarán obligadas a eximir impuestos- son mucho más sustanciales de lo que funcionarios y legisladores expresan en público.

Sin embargo Frigerio una vez más hace gala del oportunismo que lo puso al mando de la provincia, y no contradice al poder central del Puerto de Buenos Aires. "El Gobierno nacional sabe que cuenta con nuestro apoyo", reitera en lugar de criticar firmemente las retenciones, como gobernador que es.

Frigerio maneja un discurso para la provincia, pero envía mensajes claros a la gestión de centralista de Milei, dice "que no está de acuerdo, pero apoya de todas formas".

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