Bajo ese escenario, cuestionaron la media sanción que se le dio a la iniciativa en la Cámara de Diputados de la Nación con "el apoyo de 142 diputados y la complicidad del bloque representante de la Unión Cívica Radical".

"Contrariamente a la doctrina radical de defender la construcción popular, se avaló la reforma laboral, la flexibilización de los contratos de trabajo en función de los capitales extranjeros, el fin al monotributo social, mayor impuesto al salario, el fin a la moratoria jubilatoria y la restitución del impuesto a las ganancias. Además, se avanzó con el proyecto de privatización de empresas públicas y la explotación ilimitada de los recursos naturales, entre otros puntos", apuntaron.

Por otra parte, tildaron de "triste e indignante" que a pesar de "las convocantes movilizaciones a nivel nacional en defensa de la Universidad Pública, cuna del reformismo", teniendo en cuenta que el bloque radical no diera quórum para discutir un presupuesto universitario, el restablecimiento del Fondo Nacional de Incentivo Docente y una nueva movilidad jubilatoria.

Y añadieron: "Sin embargo, sí se apoyó el proyecto de destrucción, desmantelamiento y privatización cortoplacista ideado por el Gobierno nacional. Con esta determinación, evidencian no estar a la altura de la historia para tomar una decisión tan relevante para el bienestar de la sociedad. Por este motivo, los afiliados y allegados al radicalismo mostramos nuestra disconformidad ante el resultado de la cámara baja y exigimos su rechazo en el Honorable Senado de la Nación".

"La Unión Cívica Radical debe mantener sus ideales, en representación y defensa del pueblo trabajador", concluye el comunicado.