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Un rionegrino en tierras entrerrianas

Estos días se desempeña en el Senado de la provincia con muchas sospechas sobre sus contratos.

Gastón Bagnat de la búsqueda del tesoro, el Gabinete de Maiocco, el AN$E$, -por estos días se desempeña en el Senado de la provincia con muchas sospechas sobre sus contratos-, busca nuevamente la felicidad plena en las tierras de Stratta.

Fue parte de equipo que empujó la candidatura del hacendado Domingo Maiocco, en 2011, sin penas ni gloria se dedicó a la actividad privada, donde tampoco hizo pie, en un piso lleno de cheques con fondos, finalmente llegó la reconciliación y en 2015 aprovechando la ola amarillenta, terminó siendo Secretario de Gobierno y Hacienda, donde duro pocos meses, tras generar peleas con el resto del gabinete.

Ahora Senador provincial, lleva adelante una gestion muda, donde tiene contratados periodistas como asesores, para una oficina que no comunica nada, que juega a las escondidas, y que en el 2022 lo ubicó como el Senador más caro de la provincia, habiendo presentado solo 6 proyectos de declaración, coautor de 1 proyecto de ley, autor de un proyecto de ley de declaración de área natural; demasiado poco para un Senador que tiene por lo menos 13 asesores, entre los que muy pocos son oriundos de la ciudad que representa y algunos las altas coinciden con los cobros, generando sospechas que han sido presentadas en su oficina pero que Bagnat, omite contestar.

La Justicia busca o hace que busca al escurridizo senador, para entregar en mano la notificación respecto al amparo presentado por el pedido de informe sobre los contratos que suman millones por mes y que el senador otorgó en los últimos tiempos a personas que ni siquiera tienen que ver con su zona de influencia, se estima que son 13 los contratos, que sumarían alrededor de $ 3.000.000.- por mes, convirtiéndolo en el senador más caro de la historia entrerriana.

En cuanto al domicilio del buscado senador, la Justicia intento en reiteradas oportunidades ubicarlo en su despacho, hasta varias veces al día, sin embargo, nunca pudo ser ubicado en su lugar de trabajo.

Resulta realmente insólito que la Justicia no pueda ubicar un senador…

Por cuatro jornadas consecutivas, desde el 24 de febrero hasta el 27, oficiales notificadores concurrieron a la oficina del senador de Victoria para informarle acerca de las actuaciones que se le iniciaban. El viernes 24 se registraron 9 intentos fallidos por dar con el senador. ¿Acaso nadie le avisó que lo estaban buscando? ¿O al reves fue informado justamente que lo estaban buscando?

La pregunta del millón es ¿Como hará para llevar a cabo la supuesta campaña proselitista en Victoria? ¿Lo hará de de manera virtual desde una cueva? Tal vez en poco tiempo más pueda ser ubicado por la Justicia caminando por las calles de la ciudad que alguna rara vez lo vio.

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